Muchos empresarios se concentran en conseguir más y más clientes para sus negocios sin importar qué. Para ellos la búsqueda de clientes a todo costo, incluso son estrategias disruptivas o invasivas, significará mayor obtención de dinero y una visualización mayor. No obstante, un buen estratega debe tener en mente otras cuestiones.
Por ejemplo, es importante no solamente el número de clientes sino la calidad de estos y el tipo de los mismos. Algo que nos ayudará bastante, será comprender que existen varias diferentes clases. Ya sea por el producto que buscan o la forma en que se comportan no existe solamente una forma de ser cliente. En el siguiente texto te mostraremos algunas clases de ellos.
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Tipo de clientes y cómo tratarlos
Entre los emprendedores es un error muy común meter en el mismo saco a todas las personas que quieren adquirir sus productos o sus servicios. Se debe tener presente que la personalidad es un factor muy importante a la hora de comprar. Día a día las empresas se preparan para que sus productos puedan llegar a la mayor cantidad de personas y penetre en sus personalidades.
Para ello, se implementan estrategias como la oficina de atención al cliente o los diversos canales de comunicación en las redes sociales. Todo lo que se busca es conocer a fondo nuestra cliente. Esto se hace importante sobre todo en nuestros tiempos donde existe una sobrecarga de información y publicidad. Los cliente, en este contexto, buscan las empresas que satisfagan sus necesidades de manera más cercana.
Los clientes se suelen calificar por factores como su personalidad, carácter, expectativas del producto o manera de tomar decisiones. Aquí te daremos un lista de los más comunes que te puedes encontrar.
CLIENTES APÓSTOLES
Se les conoce de esa manera porque su compromiso para con la marca es muy alto. Este tipo de personas se comprometen de manera muy profunda con la difusión del mensaje de nuestra empresa.
CLIENTES FIELES
Aunque podría confundirse con la primera categoría, la verdad es que no son iguales. Este tipo de clientes muestras gran compromiso con la empresa, es verdad, pero en menor efervescencia que los clientes apóstoles. Una buena forma de crear este tipo de clientes es dando un valor añadido a tus productos, dicha estrategia te hará elevarte por encima de tus competidores.
CLIENTES INDIFERENTES
Esta categoría es una de las más difíciles de captar, tanto en tiendas online como en físicas. Son del tipo de personas que se muestran neutrales ante un producto o servicio. Lograr que se interesen es una tarea doblemente difícil, sobre todo si entendemos que implica sacarlos de sus esquemas y, además, seducirlos con nuestra propuesta.
CLIENTES REHENES
El caso de estos clientes es muy particular. No son fieles a la marca pero tampoco indiferentes a ella. Su situación se asemeja más a la de una persona que no tiene otra opción que permanecer con nosotros. Esto se puede deber a que no existe otra marca que los satisfaga o, incluso, que nuestra compañía acapara todo el mercado.
Tener este tipo de clientes es un arma de doble filo, sobre todo si comprendemos que en cualquier momento pueden desaparecer seducidos por otra marca.
Conclusión
¿Sabías que había tantos tipos de clientes? Y a cada uno hay que tratarlo de una manera. Por eso, recuerda que es importante el hecho de que les puedes asociar perfiles desde nuestro TPV, para una gestión más cómoda. Y a cada tipo de cliente, ofrecerle un servicio determinado: descuentos, regalos, promociones… ¿Qué te parece?
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